Clausura Víctor Guerrero actividades del proyecto de natación “Brazada a brazada”.
*Dirigido a alumnos del Internado “Coronel J. Cruz Gálvez”
Hermosillo, Sonora, junio 19 de 2019.- El Internado “Coronel J. Cruz Gálvez”, de Hermosillo, es una institución centenaria que responde a las necesidades formativas de las nuevas generaciones, así lo constató el secretario de Educación y Cultura al clausurar las actividades del proyecto de natación “Brazada a brazada”.
Víctor Guerrero González felicitó a los 200 alumnos que cursan sus estudios de primaria en dicho plantel y que durante un año participaron en este novedoso programa impulsado por Antonio Argüelles, reconocido nadador de aguas abiertas y primer mexicano en concluir el reto de los Siete Mares.
“Estamos viendo que nadar le cambia la vida a los niños, como ha sido el objetivo, que fue muy claro cuando lo planteamos, transformar esa institución en una institución que realmente responda a lo que los niños desean y tienen como interés”, manifestó.
El funcionario estatal agradeció la participación de los entrenadores, así como de la Secretaría de Salud que colaboró con la certificación médica de cada uno de los alumnos.
Obed González Reyna, director del Internado, aseguró que después de un año de iniciado el programa, existen cambios positivos en el aspecto físico, emocional, cognitivo y conductual de los estudiantes.
“Hemos visto cómo los niños y niñas han avanzado en sus clases de natación, pero también en el aula, donde se nota su desarrollo. Niños que tenían dificultades de comunicación y lenguaje han mejorado su expresión”, comentó.
Antonio Argüelles, director del proyecto “Brazada a brazada”, precisó que el principal objetivo del programa fue cambiar la vida de los alumnos, quienes entre clavados, brazadas y chapuzones vencieron miedos y aprendieron a nadar.
Ante las autoridades, los menores demostraron las habilidades acuáticas desarrolladas durante la duración del proyecto, que tuvo como escenario principal las albercas y trampolines del Centro de Usos Múltiples (CUM).
Mediante actividades acuáticas en un contexto educativo, los infantes adquirieron aprendizajes significativos a través del movimiento, al mismo tiempo que fortalecieron sus habilidades cognitivas y emocionales.
El proyecto “Brazada a brazada” fue implementado en el Internado “Coronel J. Cruz Gálvez” como parte de la autonomía curricular y durante el ciclo escolar 2018-2019 los alumnos aprendieron las nociones de natación, que incluyeron desde las habilidades básicas hasta el dominio motriz en el agua.
Presentes: Enrique Clausen Iberri, secretario de Salud; Patricia Calles Villegas, encargada de despacho de la Subsecretaría de Educación Básica, Genaro Enríquez Rascón, director general de la Comisión del Deporte del Estado de Sonora (Codeson), y Cecilio Luna Salazar, presidente de la Asociación Estatal de Padres de Familia.
*Dirigido a alumnos del Internado “Coronel J. Cruz Gálvez”
Hermosillo, Sonora, junio 19 de 2019.- El Internado “Coronel J. Cruz Gálvez”, de Hermosillo, es una institución centenaria que responde a las necesidades formativas de las nuevas generaciones, así lo constató el secretario de Educación y Cultura al clausurar las actividades del proyecto de natación “Brazada a brazada”.
Víctor Guerrero González felicitó a los 200 alumnos que cursan sus estudios de primaria en dicho plantel y que durante un año participaron en este novedoso programa impulsado por Antonio Argüelles, reconocido nadador de aguas abiertas y primer mexicano en concluir el reto de los Siete Mares.
“Estamos viendo que nadar le cambia la vida a los niños, como ha sido el objetivo, que fue muy claro cuando lo planteamos, transformar esa institución en una institución que realmente responda a lo que los niños desean y tienen como interés”, manifestó.
El funcionario estatal agradeció la participación de los entrenadores, así como de la Secretaría de Salud que colaboró con la certificación médica de cada uno de los alumnos.
Obed González Reyna, director del Internado, aseguró que después de un año de iniciado el programa, existen cambios positivos en el aspecto físico, emocional, cognitivo y conductual de los estudiantes.
“Hemos visto cómo los niños y niñas han avanzado en sus clases de natación, pero también en el aula, donde se nota su desarrollo. Niños que tenían dificultades de comunicación y lenguaje han mejorado su expresión”, comentó.
Antonio Argüelles, director del proyecto “Brazada a brazada”, precisó que el principal objetivo del programa fue cambiar la vida de los alumnos, quienes entre clavados, brazadas y chapuzones vencieron miedos y aprendieron a nadar.
Ante las autoridades, los menores demostraron las habilidades acuáticas desarrolladas durante la duración del proyecto, que tuvo como escenario principal las albercas y trampolines del Centro de Usos Múltiples (CUM).
Mediante actividades acuáticas en un contexto educativo, los infantes adquirieron aprendizajes significativos a través del movimiento, al mismo tiempo que fortalecieron sus habilidades cognitivas y emocionales.
El proyecto “Brazada a brazada” fue implementado en el Internado “Coronel J. Cruz Gálvez” como parte de la autonomía curricular y durante el ciclo escolar 2018-2019 los alumnos aprendieron las nociones de natación, que incluyeron desde las habilidades básicas hasta el dominio motriz en el agua.
Presentes: Enrique Clausen Iberri, secretario de Salud; Patricia Calles Villegas, encargada de despacho de la Subsecretaría de Educación Básica, Genaro Enríquez Rascón, director general de la Comisión del Deporte del Estado de Sonora (Codeson), y Cecilio Luna Salazar, presidente de la Asociación Estatal de Padres de Familia.
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